En 2016 se estrenó el thriller español “Contratiempo”, un inteligente drama cuya peculiar estructura y sorprendente final lo convirtieron en una experiencia inolvidable. Su éxito fue tal que ha dado lugar a tres remakes: uno italiano en 2018, uno indio en 2019, y ahora el director Yoon Jong-seok nos trae la adaptación surcoreana: “Confession”, un elegante remake con más de un truco bajo la manga.

La trama general sigue siendo la misma: un hombre de negocios (So Ji-sub) es acusado de asesinar a su amante (Nana) cuando lo encuentran en un cuarto de hotel al lado del cadáver de ésta. Aunque él asegura que había otra persona en la habitación, la puerta estaba cerrada por dentro y no había ninguna salida. En medio de su desesperación se reúne con una prestigiosa y calculadora abogada (Yunjin Kim). Sin embargo, antes de aceptar el caso ella trata de sacarle la verdad para saber a qué se enfrenta.

El éxito de esta historia recae en dos elementos particulares: la edición y las actuaciones, y en ambos campos el largometraje de Yoon Jong-seok entrega un trabajo impecable. La estructura de la película intercala constantemente el interrogatorio con flashbacks del recuento de los hechos; sin embargo, hay un truco, conforme avanza la historia los flashbacks dejan de ser únicamente sobre lo que los personajes recuerdan o cuentan, sino también sobre especulaciones y posibilidades: esto hace que tanto So Ji-sub como Nana tengan que interpretar a distintas versiones de ellos mismos. Ambos están a la altura del reto en recrear las mismas escenas con distintas intenciones para sembrar la duda en el espectador sobre quiénes son realmente. En el lado del presente, Yunjin Kim es increíble como un personaje aparentemente distante y maquiavélico, pero cuya vulnerabilidad emocional se va revelando poco a poco.

Este ir y venir entre pasado, posibilidad y presente es fundamental para mantener la atención del espectador, y el montaje hace un trabajo increíble en mantener un ritmo dinámico y fluido pese a los múltiples giros y varias repeticiones de secuencias. Este es el tipo de trabajos en el cual la precisión es clave: mucho tiempo puede hacer que el espectador se empiece a hacer preguntas, pero muy poco puede confundirlo: todo debe estar perfectamente medido.

El guion a cargo del propio Yoon Jong-seok respeta la estructura original pero no se limita a ser una calca del largometraje español, sino que le da una vuelta al final que sacrifica el impacto de “Contratiempo” en favor de aumentar la tensión y las apuestas. Es un ajuste bienvenido, pues aquellos familiarizados con la gran sorpresa verán recompensado su tiempo con un giro que los hará preguntarse a dónde irá la historia a partir de allí.

“Confession” es como un reloj de lujo: preciso y muy bonito de ver. Su mayor defecto es que una vez revelados sus trucos, no hay mucho más que sacarle: de manera similar a un escape room,  es una experiencia de una sola vez. Aun así, si eres fan del suspenso y los misterios definitivamente agrega esta película a tu lista, no te arrepentirás.

“Confession” forma parte de la selección oficial del Fantasia International Film Festival 2022