Al momento de escribir esto, más de 1700 civiles, incluyendo niños, han sido asesinados en Myanmar por la dictadura militar que se estableció a partir del golpe de Estado a principios del 2021. En medio de este gris panorama, “Myanmar Diaries” existe de manera casi milagrosa para resistir, denunciar y visibilizar las múltiples violaciones de derechos humanos en el país y sus estragos psicológicos en el pueblo.

Creada por un grupo de cineastas birmanos anónimos que se hacen llamar el Myanmar Film Collective, “Myanmar Diaries” está conformada por diez cortometrajes hábilmente unidos que mezclan pietaje de protestas y ataques de soldados a civiles, con poéticos segmentos de ficción.

A pesar de que cada historia tiene sujetos, naturalezas y hasta utilizaciones de forma distintas, todas se complementan entre sí para conformar un poderoso y urgente grito activista. Y es que tal vez el formato documental por sí solo no es capaz de capturar la dimensión de crueldad de lo que está ocurriendo en Myanmar. Al utilizar esta aproximación híbrida, “Myanmar Diaries” genera una concientización profunda que trasciende cualquier pietaje de alto impacto.

El filme inicia con el video viral de una joven que, mientras bailaba en las calles, accidentalmente capturó el inicio del golpe de Estado. Es un momento irónico sucedido por sufrimiento y violencia. En “Myanmar Diaries” vemos grabaciones de civiles siendo brutalmente golpeados por soldados — algunos de ellos vestidos como civiles para mezclarse entre protestantes; a un padre llorando con su hijo muerto en brazos; a una inspiradora y memorable señora de sesentaitantos años encarando a decenas de soldados por el asesinato de una joven; a un pequeña niña llorando y rogando a un abusivo grupo de policías para que no se lleven a su madre. Baja o alta resolución, horizontal o vertical, el formato y calidad no importan, pues todos son altamente efectivos. 

Entrelazado orgánicamente con este pietaje real, encontramos segmentos de ficción, todos basados en hechos reales y con protagonistas anónimos, que buscan plasmar el dolor y la desesperación del pueblo. Algunos van directo al grano y otros utilizan un acercamiento meditativo y autorreflexivo. Encontramos a una chica intentando decirle a su novio activista que está embarazada, pero éste se está preparando para esconderse del régimen en la jungla. En otro, un hombre devastado por la muerte de su mujer decide suicidarse, no sin antes asegurarse de que sea encontrado haciendo el saludo de los tres dedos, símbolo visto en los filmes de “Los Juegos del Hambre” que ha sido adoptado por la resistencia birmana. También memorable es la historia de un padre sofocado porque debe decidir si unirse al Movimiento de Desobediencia Civil o perder su trabajo y vivienda. 

Los medios de comunicación occidentales han olvidado lo que está ocurriendo en Myanmar pero gracias al cine, bendito cine, existe una herramienta con el poder para visibilizar la situación. “Myanmar Diaries” es cine de protesta con carácter urgente que expresa de manera artística la desesperanza y sufrimiento de una realidad devastadora con el objetivo de informar, demandar atención e inducir a la acción.

“Myanmar Diaries” ganó el premio de Mejor Documental en Berlinale 2022 y tuvo su estreno canadiense en el Festival Hot Docs 2022. Puedes conocer más acerca de la película y apoyar al movimiento en la página oficial myanmardiaries.com.