Unos años después de su galardonado documental “The Earth Is Blue As an Orange” sobre los efectos de vivir en una zona de guerra, la cineasta ucraniana Iryna Tsilyk nos trae su primer largometraje de ficción “Rock Paper Grenade”, un fabuloso coming-of-age que nos transporta hasta la Ucrania de los años 90 y en donde el aspecto bélico también se hace presente.
Tsilyk adapta el libro “Felix And Me” escrito por su esposo Artyom Chekh, quien también funge como coguionista. Su historia nos cuenta la infancia, adolescencia y, brevemente, adultez de Tymophiy (interpretado por Andriy Cherednyk, Vladyslav Baliuk y Volodymyr Gladky, según la etapa), un hombre que vive en una ciudad de provincia en la Ucrania postsoviética con su madre Olga (Anastasiya Karpenko). El caos llega a su vivienda cuando su abuela (Halyna Veretelnyk-Stephanova) se muda en compañía de su novio Felix (Yuriy Izdryk), un veterano de Afganistán, alcohólico que sufre de estrés postraumático.
En muchos aspectos, la narrativa utiliza el crecimiento de Tymophiy para reflejar la evolución del país. Después de la proclamación de independencia de Ucrania en 1991 y la disolución de la Unión Soviética, la nación tuvo problemas encontrando estabilidad: evidentemente fue una difícil etapa de transformación económica y social. Tym es un adolescente con poco dinero y un padre ausente que intenta adaptarse a todos los cambios (personales y externos) para llevar una vida normal a pesar de los conflictos internos que aparecen en casa.
Influenciado por el oeste y al no tener una figura paterna clara, el joven voltea a ver hacia donde puede: pósteres de Michael Jordan, Bruce Lee y Sylvester Stallone, estereotípicas figuras masculinas noventeras, tapizan su cuarto mientras que su casetera reproduce hip hop a montones. Y claro, también hay una influencia paternal más directa en su vida: Felix, el extravagante viejo con el que entabla una peculiar amistad desde pequeño y cuya conexión principal es a través de la música de piano. Tymophiy tiene problemas intentando comprender exactamente quién es esta misteriosa e impredecible figura llamada Felix que le muestra rifles y le regala sneakers con el dinero obtenido por vender granadas. Esta relación es plasmada de manera cinematográfica con gran precisión por Tsilyk y su editor Ivan Bannikov, quienes nos muestran solo las respuestas necesarias, imitando así los sentimientos de confusión de su protagonista.
Y así como la sombra de la guerra persigue a una Ucrania que ha intentado deshacerse en vano de ella (incluso mucho antes del 2014), el adolescente Tym repele nociones violentas e incluso considera “estúpido” ir a la guerra, no obstante, su vida inevitablemente está relacionada a ella debido a Felix. La guerra influye indirectamente su vida hasta desembocar en la adultez (el autor Chekh actualmente está defendiendo a su país en las líneas de batalla). Ya experimentada en temas bélicos (como vemos en su mencionado documental “The Earth Is Blue As an Orange” y en su trabajo de coguionista en “Butterfly Vision”), Tsilyk maneja estos hilos con mucha sensibilidad, implementándolos de manera orgánica a su narrativa.
Al hablar de todo esto, “Rock Paper Grenade” podría sonar como un drama pesado y oscuro pero es todo lo contrario: un coming-of-age que si bien tiene melancolía corriendo por sus venas, está lleno de humor y dulzura; es un filme que opera como una foto instantánea tomada en la Ucrania de los noventas. Con gran dirección tonal, Iryna Tsilyk plasma el sentimiento de incertidumbre de la época a través de la historia de un adolescente que escucha hip hop, quiere estar a la moda e intenta armarse de valor para llamarle a su crush (después de buscar incansablemente su número en el directorio).
Hay un aire de nostalgia hacia la música y estilo de vida noventero, así como un marcado cariño de Tsilyk hacia las mujeres que marcaron esa época. Entre hombres perdidos, rotos o ausentes, ya sea por guerra, recesión u otro aspecto social, muchas madres tuvieron que cargar con el peso de la compleja transformación de Ucrania para sacar adelante a sus familias. La película también sirve como un agradecimiento a todas ellas.
A veces “Rock Paper Grenade” puede sentirse demasiado personal pero su historia y atmósfera noventera igual te atrapa e invita a presenciar los desafíos juveniles que Tymophiy debe superar. Y todo bajo un fascinante contexto histórico, hábilmente embebido en la trama por Tsilyk. Y al fin de cuentas, eso es cine: apreciar otras culturas y problemáticas que a su vez nos permitan aprender sobre la historia.
“Rock Paper Grenade” tuvo su estreno internacional en el Warsaw Film Festival 2022. Imagen de portada cortesía de THE PR FACTORY.