“Sin Novedad en el Frente” comienza con un plano general del bosque y las montañas, todo enmarcado por una quietud sombría, de pronto y sin esperarlo, al fondo, más allá de la cordillera, estalla una tormenta llena de relámpagos atronadores iluminando el cielo ennegrecido. Más tarde entenderemos algo: no es una tormenta ni son truenos ni relámpagos… es la guerra.
Con guion de Lesley Peterson e Ian Stokell y la dirección de Edward Berger llega a nosotros la tercera adaptación de la novela antibélica de Erich María Remarque: “Sin Novedad en el Frente”. Aquí se nos narra la historia de Paul Bäumer (Felix Kammerer), un joven de 18 años que, junto a sus amigos, motivados por sus profesores, deciden enlistarse en el ejército para ir a pelear al frente occidental durante la Primera Guerra Mundial. Al llegar a las trincheras deberán enfrentarse a la realidad del conflicto bélico para dejar atrás sus fantasías sobre la guerra. Al mismo tiempo, y de forma paralela, seguimos al político alemán Matthias Erzberger (Daniel Brühl) quien busca llegar a un acuerdo con las potencias aliadas para terminar todo el conflicto y así evitar el derramamiento de sangre.
Uno podría pensar que al tener ya dos adaptaciones previas del texto de Remarque (la primera fue ganadora del Oscar a Mejor Película y Mejor Dirección en 1930) ya no habría nada más para explorar, sin embargo, el director logra darle nueva vida a la novela gracias a sus extraordinarios apartados técnicos. La fotografía (a cargo de James Friend) nos sumerge de lleno en las trincheras del frente occidental y también en tierra de nadie gracias a sus magníficos planos secuencia, permitiéndonos apreciar el diseño de producción y los efectos especiales de las explosiones con cada ataque de cualquiera de los dos bandos en conflicto. El sonido es otra pieza fundamental del maravilloso ensamble técnico pues además de hacer más inmersiva la experiencia también logra generar momentos potentísimos para nuestro protagonista al eliminar por completo el audio o sustituirlo por la música. Los silencios son tan importantes como el ruido a la hora de narrar una historia.
Por otro lado debe destacarse la actuación de Felix Kammerer quien logra transmitir la inocencia de Bäumer para luego, conforme avanza la cinta, endurecerse progresivamente hasta llegar al punto en donde ya nada le importa, lo ha perdido todo y por culpa de un orgulloso general debe batirse a duelo con el enemigo minutos antes del final de la guerra; ahí es donde verdaderamente logramos entender la transformación total del personaje, su descenso a la locura y a la animalidad.
El guion de Peterson y Berger es una crítica completa a la guerra: se ve en el contraste de la vida de Paul Bäumer y sus colegas en el frente contra la situación acomodada del general (Devid Striesow), y también gracias al personaje interpretado por Daniel Brühl: un político cuyo hijo falleció en los primeros meses de la guerra y cuyo único propósito desde ese momento ha sido detener el conflicto. Él es de los pocos que logran entender el sinsentido del aparato bélico y cómo las “muertes honrosas” de los soldados son en realidad una cruel masacre sin propósito. Asimismo, tenemos la introducción de la cinta, en donde el ejército alemán reutiliza los uniformes de soldados muertos para dárselos a los nuevos reclutas como si fuesen nuevos: los jóvenes son simples piezas desechables en un tablero mucho más grande. En el panorama actual la situación no es diferente.
“Sin Novedad en el Frente” termina con una fuerte sentencia: al inicio de las hostilidades de la Primera Guerra Mundial, en 1914, comenzó la guerra de trincheras en el frente occidental, para cuando llegó el final del conflicto, en 1918, el frente se había movido apenas unos cientos de metros: 17 millones de personas perdieron la vida por unos cuantos metros de tierra. Esa frase sobre la pantalla en negro es vital para entender el mensaje de la cinta, la crítica hacia el sinsentido que es la guerra, y al mismo tiempo tiene una vigencia aterradora si contemplamos con detenimiento nuestra realidad.
“Sin Novedad en el Frente” ya se encuentra disponible en Netflix y es la selección de Alemania para el Oscar 2023.