En el cortometraje “¡Viva el pueblo!” de Nicolás Torres Payán somos testigo de una furiosa búsqueda de justicia. Una niña está muerta y el culpable aún está suelto, al parecer se esconde en las montañas. Pero no importa a donde vaya, el odio une al pueblo y no habrá escapatoria para él.

“Estábamos muy interesados en hacer un corto sobre un sentimiento colectivo”, dijo el director Torres sobre su filme que se estará presentando en el Festival Internacional de Cine de Morelia 2020. “Al investigar, nos encontramos con el caso de un grupo de africanos que ríe y llora hasta sacar todos los sentimientos negativos. Eso es lo que a veces resulta de vivir en sociedades con tanta desigualdad y sin justicia como México: siento que necesitamos una justicia colectiva para sanarnos un poco como sociedad”.

Pero esta no es una historia común. El grupo de iracundos pueblerinos es liderado por un burro mágico que le da indicaciones a un niño para rastrear al fugitivo. Las cualidades surrealistas de “¡Viva el pueblo!” le permiten destacarse y las influencias en el cine clásico mexicano son claras.

“‘La fórmula secreta’ de Rubén Gámez fue una gran inspiración, creemos que es una de las grandes obras del cine mexicano”, dijo el director. “Cineastas y autores como Rulfo y Reygadas, en mi opinión, vienen de un mismo árbol y quisimos agarrarnos de ahí. También ‘El evangelio según San Mateo’ de Pasolini fue una gran inspiración”.

¿Y por qué un burro? “ Normalmente los trabajadores del campo en México utilizan al burro como herramienta. Se nos hace un animal muy estético y bonito. También nos gusta mucho el burro de “Al azar de Baltasar” de Bresson y queríamos hacer un pequeño homenaje”, explicó Torres.

Otro factor que le permite sobresalir a este cortometraje es la fotografía en blanco y negro de Pablo Sierra. Además de acentuar la atmósfera de fantasía, este elemento le da un magnífico toque de misterio a la trama. Esto, según el director, era para intentar poetizar el corto y hacer una historia potente con una estética fuera de lo común. “Creemos que le quedaba muy bien la influencia del neorrealismo italiano”, agregó.

Para filmar “¡Viva el pueblo!”, Torres y su equipo realizaron un trabajo de scouting, encontraron el pueblo perfecto e integraron a algunos de sus habitantes al elenco.

“Necesitábamos una laguna. Primero fuimos a Morelos, y a parte de sentir la inseguridad a todo lo que da, nos dimos cuenta que casi todas las lagunas estaban secas. Luego llegamos a Hidalgo y desde el primer momento hubo algo energético. Conectamos con el lugar y su gente”, comentó Torres. “Empezamos a ir, nos quedamos, hicimos castings y la gente estuvo muy dispuesta desde el principio a jugar y estar con nosotros. Eso es algo que agradecemos mucho. Para los personajes que considerábamos más difíciles llevamos actores y los mezclamos con los no actores para intentar crear una unión”.

Al malabarear con todos estos elementos, Nicolás Torres Payán demuestra gran potencial. Pero, ¿se verá su carrera afectada tras la desaparición de fideicomisos en México?

“Creo que uno como cineasta tiene que hacer autocrítica del cine que está haciendo, de los medios y el dinero que está utilizando. Si se quitan los fideicomisos y no se sigue apoyando, está fatal. Sin embargo, como cineasta joven, y tras hacer este corto me doy cuenta de que, con los medios que tenemos podemos filmar con mucho menos y ser más responsables con los recursos. Creo que también debe haber una reflexión de nuestra parte de cómo estamos usando los fondos”, dijo Torres. “Más allá de la corrupción que sin duda existe en todo México, como cineasta debemos ser responsables y no solo verlo de manera individual. Si uno filma más barato, hay más dinero para más gente y más posibilidades para óperas primas. Creo que como cineasta hay que ser reflexivos, autocríticos y empáticos con los otros cineastas y con la comunidad”.

Por lo pronto, Torres Payán ya se encuentra listo para presentar su cortometraje en FICM 2020. Y aunque también existirá una posibilidad de visualizar su trabajo de manera digital, no hay nada como la experiencia presencial de un festival de cine. “El festival es como una manera de ver a una comunidad unida, de vernos fuertes y apoyarnos. Me siento muy agradecido con el festival y muy afortunado de ser parte de esta comunidad y aportar mi granito de arena”.

“¡Viva el pueblo!” forma parte del Programa 6 de Cortometraje Mexicano. Será proyectado de manera presencial el viernes 30 de octubre en Morelia, pero estará disponible de manera gratuita a través de Cinépolis Klic a partir del 30 de octubre y será transmitido por Canal 22 el día sábado 31. Para más detalles de horarios puedes consultar la página oficial del festival.