Hace ya más de 40 años, antes de traernos el multiverso a Marvel, el icónico director Sam Raimi estrenaba la película que le ganaría el amor de las audiencias: Evil Dead, la cual se ha convertido en un clásico que dio origen a toda una franquicia.

Ahora con el estreno de Evil Dead Rise es un buen momento para hacer una retrospectiva de esta saga y definir de una vez por todas cuál es la mejor. En este ranking no se incluye la serie Ash vs Evil Dead ni el cortometraje Within the Woods:

5. Army of Darkness (1992)

Siempre iba a ser difícil seguir los pasos de la maravillosa Evil Dead 2, y Army of Darkness lo comprobó. Aunque se agradece el experimento de llevar la franquicia por una ruta inesperada alejada del terror, algo de la magia se pierde en el camino.

En esta tercera parte, Ash (Bruce Campbell) es lanzado al año 1300, donde se convierte en el elegido para recuperar el Necromicón (el Libro de los Muertos) y acabar con un ejército de muertos vivientes. Aunque el paso de horror a fantasía es uno interesante y hay escenas muy épicas, a la película le falta esa malicia amenazante que enamoró a los fans de la saga. 

Bruce Campbell es tan divertido como siempre y la idea de llevar la maldición a una gran escala es bastante ambiciosa, pero la película se siente demasiado lejos de sus orígenes y parece más un fan fiction que la continuación de una de las películas de culto más queridas por las audiencias.

4. Evil Dead Rise (2023)

Tras casi 10 años del último remake de la franquicia, el director Lee Cronin la trae de regreso con una muy necesaria renovación. En lugar de suceder en un bosque, esta continuación de la saga se desarrolla en un edificio, donde una chica llamada Beth (Lily Sullivan) se enfrenta a su hermana poseída, Ellie (Alyssa Sutherland). Encerrada en el apartamento de esta sin ninguna escapatoria, su reto es sacar a sus tres sobrinos con vida de esta pesadilla hecha realidad.

La sangre y la tensión son perfectamente manejadas por Cronin, quien sabe bien lo que los fans buscan y se los entrega de una forma que es a la vez original y hace varios homenajes a sus predecesoras. Sin embargo, a diferencia de los otros filmes en esta lista, los personajes están desarrollados a un nivel demasiado superficial y la entidad maligna a ratos actúa de forma demasiado conveniente para los intereses de Beth. Aún así es una entrada digna en el universo de Evil Dead.

3. Evil Dead (2013)

Este remake a cargo del director Fede Alvarez planeaba revivir la franquicia y llevarla por nuevos caminos. El director uruguayo deja de lado la comedia para desbocarse por completo en lo visceral, y el resultado es bastante grato.

La trama es la misma que en la primera película: cinco amigos están encerrados en una cabaña cuando una terrible maldición se desata y los empieza a acabar uno por uno. El guion hace varios cambios acertados sin alterar demasiado la historia original: ahora, por ejemplo, están encerrados como parte del proceso de desintoxicación de la protagonista, por lo que aluden su comportamiento extraño a esto en lugar de a una posesión, cosa que aumenta el suspenso.

Alvarez logra darle a su película una identidad propia y produce una de las experiencias más intensas que he vivido en el cine, para bien y para mal. Así como su gore extremo causa sensaciones fuertes y un gran sentido de peligro, a veces cae en la explotación gratuita, pero definitivamente es una experiencia memorable.

2. The Evil Dead (1981)

La película que lo empezó todo: The Evil Dead es una fresca mezcla de terror y comedia que presentó al mundo la retorcida e ingeniosa mente de Sam Raimi. La historia sigue a un grupo de jóvenes que van a una cabaña a pasar un buen rato, hasta que encuentran el Necromicón y despiertan una terrible maldición. 

Grabada con un bajo presupuesto y un concepto ambicioso, la audacia de Raimi rindió frutos y resultó en una ingeniosa comedia negra llena de sangre, vísceras, suspenso y risas inesperadas. La premisa es llevada hasta sus últimas consecuencias con interesantes muertes y la amenaza de un enemigo invencible.

¿Qué hace que esta interesante entrega no esté hasta el tope de la lista? Pues Raimi regresaría con una secuela muy peculiar…

1. Evil Dead II (1987)

La historia de esta secuela es tan fascinante como la película misma. Con su carrera casi por los suelos, Raimi consiguió financiamiento para una segunda parte de su gran clásico; sin embargo, había dos inconvenientes: Dino de Laurentiis accedió a financiar la película solo si era muy similar a la anterior, y Raimi no tenía los derechos para su obra original.

Así es como el director armó una confusa pero emocionante obra que es a la vez un remake y una secuela de la original (una recuela). Los primeros minutos son exactamente iguales a Evil Dead, solo que en lugar de 5 amigos ahora son únicamente Ash y su novia. A partir de que se desata la maldición, todo sigue un patrón similar a la original, pero con mucho más presupuesto y un equipo de trabajo mucho más experimentado. 

Sin embargo, el verdadero valor de esta entrega está en el uso mucho más pulido de comedia y terror: esta extraña fusión de géneros aparentemente opuestos es lo que la diferenció de las películas de la época, pues provoca carcajadas y temor en partes iguales. De forma muy ingeniosa, la película se vuelve una montaña rusa emocional en la que la tensión provocada por el amenazante enemigo es liberada una y otra vez por su mórbido sentido del humor, solo para regresar con más fuerza y sangre en la siguiente escena. Es un balance que incluso hoy muy pocos directores pueden mantener, y que el propio Raimi repetiría en la muy divertida Arrástrame al infierno.

Los momentos más icónicos de la franquicia vienen de esta película: aunque Ash es el sobreviviente en la original, acá ya es desarrollado como el héroe que tanto amamos y conocemos, pues pasa de ser un personaje reactivo a un torpe pero intrépido asesino de zombies, con su mano de motosierra incluida. 

Todo es llevado a una escala más grande, tanto los efectos como la mitología, y el resultado es un producto que supera por mucho al original y nos dio las verdaderas bases de lo que ahora es Sam Raimi y Evil Dead.