Alabado por amantes del cine B y de acción japonés, el artemarcialista y actor Tak Sakaguchi se ha consolidado como toda una figura de culto. Y esa popularidad solo incrementará con su papel protagónico en “Crazy Samurai Musashi”, película que simula una sola secuencia de acción de 77 minutos y una de las joyas estelares de Fantasia Fest 2020.
La historia de “Crazy Samurai Musashi” es simple: el clan samurai de los Yoshioka busca asesinar a Miyamoto Musashi, quien deberá enfrentar y asesinar a todo oponente en su camino. El filme es una representación de la más famosa batalla de Musashi, un legendario samurai en la vida real, conocido por su maestría de la espada y récord invicto en batallas. Y claro, en este caso, es Sakaguchi (“Re:Born”) quien lo interpreta.
Después de una breve explicación de alrededor de 10 minutos, Musashi aparece y comienza el festín de acción samurai. A partir de aquí, el director Yuji Shimomura nos mete en una larga batalla, sin cortes y simulada en una sola toma (sí, tipo “1917”). En ella, Musashi enfrenta y asesina a hordas de enemigos.
Este formato es ambicioso y espectacular. Las coreografías son complicadas y Sakaguchi las ejecuta con maestría. Es casi como un videojuego. Entre ‘oleadas’ de samurais, Musashi se toma un respiro, mágicamente encuentra agua, o una nueva espada. Luego llegan más contrincantes, y la acción continua. Este ciclo se repite por 77 minutos con algunas variaciones en el camino. De repente nos topamos con oponentes más poderosos, como si fueran jefes de nivel, pero Musashi despacha rápidamente a la mayoría de ellos. Esto me pareció un desperdicio, pues si estos ‘jefes’ hubieran representado mayor peligro para el protagonista, el filme hubiera recibido un necesario empujón de energía.

“Crazy Samurai Musashi” es un proyecto ambicioso y definitivamente aprecio la creatividad en despliegue, así como la habilidad de Sakaguchi para mantener el ritmo. Sin embargo, algunas secuencias de pelea se sienten demasiado largas, y como resultado, la premisa se llega a sentir cansada. Después de 10 minutos de ver a Musashi matando gente, es claro que la ejecución pudo haber sido mejor.
Comprendo que Musashi es un total badass y la esencia del filme es gozar de un hombre utilizando su espada para rebanar a cientos de enemigos sin parar, pero “Crazy Samurai Musashi” se hubiera visto beneficiada de algún giro emocional, o como mencioné anteriormente, un chispazo de verdadero peligro para meterte en la historia y generar la sensación de que hay algo en juego.
Habiendo dicho todo eso, me la pasé bien con este filme. Ver a Musashi blandir su espada es hipnótico, y hay algo satisfactorio en ver cómo se toma su tiempo para derrotar a los pobres diablos que intentan hacerle frente. Las tomas son brillantes y le dan mucho dinamismo a las peleas; muchas veces la cámara se posiciona detrás de Musashi, reforzando la sensación de que estás viendo un videojuego de acción en tercera persona. Y si todo lo anterior falla, la escena final es una fantástica y brutal recompensa que dejará satisfechos a fanáticos del género.
Amantes de la dupla Shimomura/Sakaguchi, los samurai, y el cine B van a disfrutar “Crazy Samurai Musashi”, un filme cool con fenomenales peleas de katana y una fotografía llamativa. Y aunque la premisa llega a ser aburrida, la presencia y habilidades de Sakaguchi son suficientes para saciar tu sed de acción samurai.