Aunque la batalla por los derechos de la población LGBTQ+ se sigue librando en todo el mundo y muchos lugares han logrado avances importantes, algunos países siguen estando muy atrasados en cuestiones sociales. En Kenia, tener intimidad homosexual es un crímen penado hasta por 14 años de cárcel y las consecuencias por salir del clóset pueden ser letales. Esa realidad es a la que deben enfrentarse millones de personas queer como Samuel, el sujeto a seguir en el documental “I Am Samuel” de Peter Murimi.

Samuel es un joven gay que lleva una doble vida en Kenia. Trabaja en construcción, visita a sus padres cuando puede y pasa los ratos libres con su novio Alex. Sin embargo, ambos deben mantener la relación en secreto por temor a ser objeto de hostilidades. 

Temprano en el documental, Sam revela que fue presionado para tener una novia y como resultado tiene una hija. Ahora se pregunta, ¿qué pasaría si la niña se entera de que su padre es gay? Esto no debería ser ningún problema, pero Sam plantea la pregunta con miedo en su voz. La situación en Kenia es terrible y la represión es hostigante.

Murimi grabó el filme a lo largo de cinco años utilizando una técnica de cinema verité. Es un enfoque naturalista, honesto y discreto en el que a veces parece que somos una mosca en la pared. La virtud más importante es el nivel de intimidad que el director logra con su sujeto: a través de testimonios personales, Samuel revela con toda confianza sus temores, alegrías y el miedo al que se enfrenta todos los días.

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Mantener el secreto de su homosexualidad ante sus padres es lo más complicado y un punto central del documental. Samuel creció en el campo y su padre es un pastor local con ideas tradicionales que constantemente le pide contraer matrimonio. Naturalmente, Sam teme el rechazo de su familia y con el paso de las visitas, se vuelve más complicado mantener la mentira.

Hay momentos muy duros. Pietaje de la paliza a un joven gay en la calle o un amigo de Sam mostrando las huellas de un ataque homofóbico son algunas de las muestras que Murami provee para comprender las consecuencias de la homofobia en el país. Sin embargo, el director equilibra la tristeza con momentos de positividad derivados del romance protagónico y la manera en cómo disfrutan de cada momento juntos. 

“I Am Samuel” es un sencillo e íntimo retrato de homosexualidad en un país restrictivo. Un documental que, a pesar de las adversidades propias de la situación, logra transmitir un poderoso y positivo mensaje de libertad. La relación entre Alex y Samuel es maravillosa, y a través de besos, celebraciones y declaraciones, Murami celebra al amor y a la aceptación.

“I Am Samuel” forma parte de la selección oficial del BFI London Film Festival 2020.