Ver películas de kung-fu es bueno para el alma y es aún mejor cuando tienes a personajes entrañables y un respeto por las tradiciones artemarcialistas. “The Paper Tigers” es justo lo que el doctor recetó. Un filme sobre artes marciales que destaca el valor de la amistad.

Durante su infancia y adolescencia, Danny, Jim y Hing compartían un fuerte lazo de amistad forjado a través de las enseñanzas de kung-fu impartidas por su maestro Cheung (Roger Yuan). Pero un incidente los separó y los condujo a distintos caminos de vida. Más de 30 años después, los ‘Tres Tigres’ deben encontrarse de nuevo para investigar y vengar la misteriosa muerte de su maestro. El problema es que ahora son señores maduros y sus cuerpos ya no están para andar practicando artes marciales.

Durante la búsqueda por financiar esta película independiente, el director Quoc Bao Tran recibió una suculenta oferta de 4 millones de dólares con una condición: que el protagonista fuera caucásico. Valientemente, Tran se rehusó y mejor reunió el presupuesto a través de Kickstarter. Esto es una muestra del compromiso del director por contar una historia fiel a su visión y principios. Y como resultado, su filosofía es palpable en “The Paper Tigers”, un filme coherente con las bases del kung-fu que utiliza a un elenco diverso para darle vida a la historia.

En los primeros minutos vemos un montaje noventero tipo VHS con Danny, Jim y Hing en su adolescencia practicando artes marciales, cotorreando y pasándola muy bien juntos. Definitivamente hay una vibra de Karate Kid presente, combinada con el encanto de películas de kung-fu de vieja escuela. Y aunque inmediatamente la historia nos lleva al presente para seguir a esas tres mismas personas ahora como señores cuarentones, la atmósfera es la misma: diversión y buena vibra.

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Danny (Alain Uy) es ahora un vendedor de seguros divorciado que tiene poco tiempo para convivir con su hijo, Hing (Ron Yuan) usa peluca y tiene una rodilla muy lastimada, y Jim (Mykel Shannon Jenkins) dejó atrás el kung-fu para entrenar Artes Marciales Mixtas. Los tres tuvieron una riña en la adolescencia, perdieron el interés en el kung-fu, rompieron su palabra y por lo tanto decepcionaron a su maestro. De aquí surge una filosofía recurrente de la historia: la importancia de cumplir tus promesas y ser coherente con tus acciones. Ellos prometieron dedicar cuerpo y alma al kung-fu, pero no cumplieron con su palabra. Las consecuencias de esa carencia de virtud se ven plasmadas en Danny, quien entre tanta mentira en su vida, está cerca de perder la custodia de su hijo. Además, el villano de la historia es un simbolismo del cómo la deslealtad y falta de compromiso puede tener serias repercusiones en tu futuro.

Me la pase increíble recorriendo la historia junto a los tres protagonistas gracias a que su amistad se siente auténtica y hay enorme química entre los actores. Además, la premisa cumple con su cometido. Ver a tres señores fuera de forma intentando regresar a las andadas es bastante divertido; la comedia es ligera, efectiva y respetuosa con los temas centrales del filme. Y aunque no hubo ninguna pelea de kung-fu que me volara la mente, todas tienen mucha energía y dinamismo. Fue imposible no sonreír durante todo este viaje.

Entre mis elementos favoritos de la película se encuentra el personaje de Carter (Matthew Page), un maestro de kung-fu caucásico que se cree asiático. Carter estudió en otra escuela de kung-fu y creció con los Tres Tigres pero nunca pudo derrotarlos. Ahora de grande, es él quien está en buena forma física y aprovecha cualquier oportunidad para burlarse de sus enemigos generacionales. Las interacciones entre Carter y los Tigres son eléctricas y derivan en momentos de frustración, acción y risa. Page hizo un gran trabajo balanceando su actuación entre fanfarrón, aliado y sabio wannabe.

No todo es hermoso, pues definitivamente le hizo falta una pulida al guión. Las motivaciones del antagonista son bastante pobres y hay algunos elementos de la historia que no son explorados en su totalidad; sentí que la reconciliación entre los Tres Tigres fue muy rápida para la cantidad de años que pasaron separados. Sin embargo hay más corazón que defectos en la película.

“The Paper Tigers” es un encantador filme de kung-fu con personajes simpáticos y una buena lección sobre amistad. Quoc Bao Tran agregó el toque justo de nostalgia a su historia, sin perder de vista el objetivo de rescatar las virtudes filosóficas del kung-fu. Una película que patea trasero e irónicamente, reflexiona sobre cuándo es que un trasero debe ser pateado.

Esta película tuvo su estreno mundial en Fantasia Fest 2020. Tendrá su estreno en cines y VOD en Estados Unidos el 7 de mayo.