El sentirse diferente y que el mundo no te comprenda son los temas de “Poupelle of Chimney Town”, una cinta animada japonesa, la cual resalta por su deslumbrante apartado técnico, así como su emotiva narrativa, que si bien cae en lugares comunes, no deja de sorprender y conmover.
Esta encantadora fábula tiene como protagonista a Lubicchi, un joven deshollinador quien se siente desamparado y abandonado luego de la muerte de su padre, Bruno. En la noche de Halloween, un ser misterioso nombrado como el Hombre basura aparece en Chimney Town, y al poco tiempo entabla una bonita amistad con Lubicchi; juntos se embarcan en unas cuantas aventuras emotivas que les enseñarán que la vida, pese a sus tragedias y malos ratos, es para disfrutar.
Yusuke Hirota, debuta como director y entrega una cinta memorable, de esas que buscan llegar al corazón y hacer reflexionar al espectador de forma honesta y simple, sin tanta complejidad narrativa o discursiva. Al mero estilo de Studio Ghibli, esta cinta aprovecha eficazmente su nivel de animación, el cual deslumbra por sus ambientes bellamente coloreados e iluminados, que sin duda parecen pinturas con alma.
Otro apartado que resalta en la manufactura narrativa son sus personajes, quienes lucen diseños físicos interesantes; el Hombre basura bien podría ser parte del universo de “Robots” o de “La familia del futuro” y funcionar a la perfección; el niño Lubicchi es desarrollado con mucha energía y con una gran carga dramática de por medio, con errores y aciertos, aunque también con madurez ante las desventuras. Con el paso de los minutos, los acontecimientos van encendiendo una chispa de esperanza por un mundo más amable y comprensivo.
Lo más interesante que Hirota le da a su obra es la posibilidad de recibir mensajes positivos con sinceridad y elocuencia directos hacia el corazón. No hay rasgos indecentes de sentimentalismo manipulador o discursos forzados con tal de cumplir requerimientos industriales; aquí se reciben temas tratados con respeto, conocimiento y soltura.
Los dos personajes principales, uno humano y el otro no, al final muestran la misma capacidad de inteligencia y emoción por la vida, por ayudar al otro y por construir vínculos afectivos sin la búsqueda de una recompensa material, sino con la única encomienda e interés de hacer del mundo un lugar donde todos puedan coexistir, sin egoísmo o desdén.
“Poupelle of Chimney Town” es de esas cintas animadas que llegan al corazón sin atajos o mentiras, acondicionada con un apartado estético resaltante y personajes memorables. Una pieza nutritiva que cualquier gustoso por las historias simples y emotivas, disfrutará.
“Poupelle of Chimney Town” forma parte de la programación Green Strand del Festival Internacional de Cine de Los Cabos 2021.