Escrita y protagonizada por Tom Hanks, “Greyhound en la mira del enemigo” fue todo un éxito para Apple TV+. Tuvo el mejor estreno en la corta historia de la plataforma y fue una de las películas de streaming más vistas de todo el 2020.
La acogida tan positiva que tuvo de audiencias ha mantenido a la película en conversación y con buenos números, por lo que Apple ya ha comenzado a empujar su campaña de consideración para premios Oscar. Y es que, a pesar de haberse estrenado en streaming, “Greyhound” fue evidentemente creada con la intención de verse en pantalla grande y por lo tanto, tiene deslumbrantes elementos técnicos que vale la pena destacar.
Para comprender la maestría detrás de “Greyhound” tuve oportunidad de participar en una conferencia de prensa con su equipo técnico: Shelly Johnson, director de fotografía; Julie Weiss, diseñadora de vestuario; David Crank, diseñador de producción; Blake Neely, compositor; Michael Minkler, diseñador de sonido; y Sidney Wolinsky, editor.
Creando la ambientación de “Greyhound”
Tener a Tom Hanks dirigiendo una flotilla de barcos en medio de la Segunda Guerra Mundial no fue tarea nada fácil y curiosamente, no hubo agua involucrada. La película se filmó en tres locaciones: el lobby de un hotel (para la escena inicial), un estudio de sonido en Louisiana y en el USS Kidd, uno de los últimos barcos destroyers de la guerra que ahora se encuentra “retirado” en un museo.
El desafío técnico fue muy complicado, pues la filmación se dio gracias a la construcción de sets que imitaban los interiores de un barco de la Segunda Guerra Mundial.
“Dave [Crank] nos construyó un increíble set en una base de movimiento. Fue un poco diabólico porque estaba mojado y resbaladizo. Trabajar las secuencias en esa base definitivamente fue difícil para los operadores de cámara y para captar la luz natural”, explicó el cinefotógrafo Shelly Johnson, quien también ha trabajado en películas como “Jurassic Park III” y “Capitán América: el primer vengador”.
Y es que obtener luz natural era clave en los planes del director Aaron Schneider, quien también es cinefotógrafo y tuvo conversaciones importantes con Johnson para lograrlo.
“Siempre que estás en este tipo de películas con muchos efectos visuales, existe esta idea de que las luces tienen una cualidad Hollywoodense, así que [Schneider] me insistió en ensuciar un poco y traer fuentes de luz desde ángulos naturales, y hacer lo opuesto a lo que normalmente harías en un escenario”, explicó Johnson. “Afortunadamente, el set que David construyó era absolutamente increíble, en él sentías la idea de que muchos hombres habían peleado y muerto. La nave tenía alma propia y el set de David era muy fiel en los acabados y superficies; el sentimiento que imbuía era notable”.

Es importante destacar que la película entera se apoyó de abundantes efectos especiales. Por ello, cada elemento técnico estuvo estrechamente relacionado al equipo de VFX.
“Fue un trabajo de progreso en donde las ideas de cómo íbamos a trabajar cambiaban día a día”, explicó el diseñador de producción, David Crank. “Desde el primer escenario que construimos, todo se fue agrandando. Íbamos de un lado a otro, en constante aprendizaje de lo que teníamos que hacer para trasmitir algo, así que las ideas que teníamos al principio probablemente estaban completamente equivocadas al final. Sabíamos lo que necesitábamos para que el equipo de efectos especiales pudiera trabajar, pero el resultado era un poco diferente con cada día que pasaba.”
Y para darle el toque extra de autenticidad, la diseñadora de vestuario Julie Weiss se encargó de permanecer fiel a la época, pero también tuvo oportunidad de darle colorido al ambiente gracias a la escena inicial entre Tom Hanks y Elisabeth Shue en un hotel durante épocas decembrinas.
“Como diseñadora añoras ese tipo de escenas porque tienes todas estas prendas, a Elisabeth Shue y la oportunidad de mostrar colores navideños. Hay trajes de los años 40, una atmósfera especial y a muchas personas que puedes vestir”, dijo una entusiasmada Weiss. “El uniforme de Tom Hanks era también importante porque era el último antes de abordar a una misión en donde usa un gran abrigo junto a un grupo de hombres que pronto se convertirían en más que simples puntos.”
Uniendo el rompecabezas y musicalizando “Greyhound en la mira del enemigo”
El sonido y edición fueron esenciales para transmitir el sentimiento de desesperación de la tripulación y que así, audiencias comprendieran el peligro a su alrededor. Para lograr esto, el director Schneider tuvo la fortuna de contar con el tres veces ganador del Oscar, Michael Minkler (“Chicago”, “Black Hawk Down”).
“La película era sobre tener 48 horas para atravesar una zona en el océano, así que todo tenía que ser apresurado. Estaban siendo perseguidos, pero también tenían que perseguir submarinos, proteger otro navío y rescatar a otro, así que todo tenía que ser frenético”, explicó Minkler sobre el sentido de urgencia de la película. “Teníamos algunas pausas, pero no podía haber mucho de eso”.
Minkler tenía la labor de crear una atmósfera auténtica de guerra y nos explicó sobre su proceso de diseño sonoro.
“Quieres que la película sea dramática y emocionante, quieres hacer saltar a la audiencia cuando se dispara un arma, así que endulzas los sonidos. Puedes hacerlo con cinco, diez o veinte nuevos elementos para probar. Experimentamos con distintos tamaños y formas de las armas, todas suenan distinto, pero deben ser aterradoras y poderosas”, explicó el ganador del Oscar. “Las armas están ahí para emocionar y asombrar porque debes poder imaginar a un destroyer real que tenga todo ese armamento a bordo y al que además, le están disparando. Debe ser algo aterrador”.

Entre la tensión, la juerga naval, los disparos y la siempre presente amenaza de submarinos alemanes, se necesitaba de mucha destreza para conectar los puntos… y eso fue lo que el editor Sidney Wolinsky logró.
“Afortunadamente, nuestro director es muy inteligente y lo tenía todo estudiado, así que me indicó cuántos proyectiles se necesitaban para realmente destruir un submarino, o cuáles eran las diferencias entre radares”, dijo Wolinsky. “De eso trata la historia: de los desafíos específicos involucrados de encontrar a un submarino y exitosamente destruirlo, y para mí ese desafío fue comprenderlo y darle vida con las imágenes que teníamos.
Para crear tensión fue también importante el score original de Blake Neely, compositor con amplia experiencia en televisión y encargado de musicalizar series de superhéroes como “The Flash” y “Arrow”.
“Todo mi trabajo en el género de superhéroes en televisión me preparó para ‘Greyhound’ porque veía al Capitán Krause como un superhéroe. Aprender a mantener la tensión temporada tras temporada en televisión me ayudó pues aquí había una batalla tras otra”, explicó Neely, quien tuvo que recurrir a un score más operático y manipular la tensión. “Cuando teníamos un momento de baja intensidad, utilizaba a un caluroso y reconfortante sonido orquestal, para que cuando regresara la tensión a la película, el espectador quisiera detener todo y decir: ‘¿podríamos regresar a ese lindo oboe por un segundo?’”.
Gracias a su trabajo en la serie de TV, “The Pacific”, Neely contaba con experiencia en el género de guerra, pero ¿cómo intentar traer algo nuevo a la mesa en un género tan poblado?
“La presión está en intentar hacer algo nuevo. Han habido muchas películas de guerra y muchos fantásticos scores. Creo que mi acercamiento es intentar olvidarme de eso y honrar a lo que ha venido antes de mí, pero tratando de hacerlo mío”, explicó Neely. “Cuando Gary y Tom llamaron querían un tema como el de ‘The Pacific’, y eso fue aterrador. ¿Podía lograr eso de nuevo? Afortunadamente pude encontrar un punto ideal.”
Durante la conferencia, Mankler destacó la sinergia que hubo entre el equipo y no tuvo más que halagos para sus compañeros, en especial Neely, con quien tuvo que trabajar muy de cerca.
“Gracias a la construcción modular de su música, pudimos mover las cosas cuando era necesario”, dijo Mankler sobre la composición de Neely. “Y como era la película de Tom – él la escribió – siempre estaba agregando ideas, por lo que las cosas cambiaban y evolucionaban. Fue una gran alegría ver a la película madurar. Y maduró con música, diálogos y efectos visuales. Todo tenía que ser modular para funcionar al máximo todo el tiempo y, sin importar lo que Tom tuviera en mente, siempre teníamos que poder entregar algo que pudiera hacerla mejor”.
Para su consideración, “Greyhound en la mira del enemigo” se encuentra disponible en Apple TV Plus y buscará contender por numerosos premios durante la temporada.