En este momento, los ojos del mundo entero están puestos en “Spider-Man: No Way Home”, cinta que cerrará la trilogía del Hombre Araña en el Universo Cinematográfico de Marvel y promete abrir las puertas del multiverso para la franquicia superheroica del momento, sin embargo, esta nueva propuesta se aleja bastante de los conceptos presentados en la ya lejana “Spider-Man: Homecoming” del 2017.

Lo anterior me llevó a cuestionarme: ¿Dónde quedó ese perfil bajo del personaje? ¿Han sido olvidadas aquellas tramas introducidas en “Homecoming”? ¿Por qué han traído de regreso a los icónicos villanos de las sagas anteriores? ¿Fue ésta siempre la dirección que Marvel quiso para el personaje o los fanáticos y la taquilla han afectado la producción de las cintas?

El regreso a “casa”

Spider-Man salvó a Marvel Comics de la quiebra cuando en los años 90 le vendieron los derechos cinematográficos del personaje a Sony Pictures. El proyecto para realizar un filme del arácnido superhéroe pasó por varias manos, desde James Cameron (“Titanic”) hasta Michael Jackson. Finalmente, fue Sam Raimi (director de la trilogía de “Evil Dead”) el elegido para llevar la batuta de lo que terminaría siendo una aclamada trilogía.

Las dos primeras cintas representaron un éxito crítico y comercial mientras que la tercera fue vapuleada por críticos y fanáticos pero superó a sus antecesoras en recaudaciones. Para Sony Pictures se trataba de un éxito a todas luces y quisieron poner en marcha una cuarta película, misma que, por distintas circunstancias, fue imposible levantar del suelo. 

Sin embargo, Sony no iba a rendirse. Spider-Man era una mina de oro (la trilogía de Raimi, en sus respectivos años de estreno, estuvo en el tercer puesto de recaudación mundial en taquilla) y las cintas de superhéroes estaban teniendo un aire renovado gracias a los esfuerzos de cineastas como Jon Favrou y Christopher Nolan (“Iron Man” y “The Dark Knight”). Un reboot llegó a las salas de cine en 2012, justo el año que el mundo vio a los Vengadores unirse por primera vez.

Los fans comenzaron a pedir un cruce entre el superhéroe arácnido y el Universo Marvel desde la primera “The Amazing Spider-Man” y “The Avengers”. Después del éxito económico del gran equipo de héroes, los ejecutivos de Sony contemplaron la idea de prestar al personaje o mostrar guiños a su universo arácnido en las siguientes cintas de Iron Man, Thor o Capitán América pues económicamente se trataba de un trato donde ambas compañías ganarían millones, pero eso nunca sucedió.

Cuando en 2014 la secuela del reboot orquestado por Sony, “The Amazing Spider-Man 2”, no obtuvo las ganancias esperadas (llegó a colocarse en el top 10 de recaudaciones en taquilla de ese año pero muy por debajo de su antecesora), las negociaciones comenzaron con Marvel y Disney. En Octubre de ese mismo año se anunció la adaptación del cómic  “Civil War” dentro de la tercera película de Capitán América en donde los fans esperaban pudiera darse el tan ansiado cruce entre Spider-Man y los Vengadores, pues en las historietas, el arácnido es un personaje importante para el desarrollo de esta trama particular. Hubo meses de especulación, rumores y finalmente la productora de Sony, Amy Pascal, confirmó junto a Kevin Feige, cabeza de Marvel Studios, la inclusión formal del Hombre Araña en el Universo Cinematográfico de Marvel dentro de “Captain America: Civil War”. Además presentaron al joven encargado de llevar el pesado manto del superhéroe arácnido: Tom Holland, actor inglés conocido por su papel en “The Impossible” de Juan Antonio Bayona.

Las quejas, el escepticismo y las ansias no se hicieron esperar por parte de los fanáticos pues dudaban del intérprete; todo eso dejó de importar tras el lanzamiento del segundo avance de “Civil War” pues este cerraba con Spider-Man interactuando con los Vengadores, un momento pequeño pero que de una o de otra manera cumplía el sueño de muchos: el Hombre Araña volvía a Marvel, volvía a casa.

Un coming-of-age de superhéroes

Luego de su paso por la guerra civil de Vengadores, se confirmó que el personaje también aparecería en las siguientes dos cintas del equipo (“Infinity War” y “Endgame”) y además tendría sus propias películas individuales dentro de este universo donde harían apariciones regulares actores de la franquicia de Disney. Así, todo se sentiría más cohesionado.

El encargado de dirigir esta nueva etapa cinematográfica del personaje fue John Watts, un director conocido por su película “Clown” ubicada dentro del género de terror y el thriller de acción “Cop Car”; la elección del director fue (a la fecha sigue siendo) cuestionada por los fanáticos en redes sociales pues sus cintas no se destacan mucho ni generaron ruido en sus respectivos años de estreno, sin embargo Marvel/Sony le dieron el empleo.

Al tener un Peter Parker aún bastante joven, los productores tuvieron la idea de filmar un coming-of-age de superhéroes. Una película coming-of-age se centra, sobre todo, en el crecimiento de un personaje (un adolescente, principalmente) y en cómo éste madura. El concepto sonaba bastante atractivo e innovador para una película del género superheróico y más aun viniendo de Marvel/Disney quienes, hasta ese momento, en pocas ocasiones se habían salido de la fórmula establecida por “Iron Man”.

Así, en 2017, llegó “Spider-Man: Homecoming” (el juego de palabras con el regreso a “casa”, Marvel, y el baile de bienvenida de las preparatorias norteamericanas es ingenioso), una cinta con una aproximación nunca antes vista al personaje en el cine: sus años escolares. Además, el filme reducía en escala los acontecimientos mostrándonos el día a día de las personas que habitan este universo lleno de héroes luchando sus batallas y las consecuencias de estos eventos para la gente de a pie.

De este último concepto se desprende la historia del villano Vulture, interpretado magníficamente por Michael Keaton (resucitado por Iñárritu en “Birdman”), quién es un hombre cuyo trabajo de reparación y construcción fue sustituido por una subsidiaria de Stark Industries y debe encontrar la forma de mantenerse y a su familia.

El Peter Parker adolescente también es interesante pues lo vemos atendiendo a clases, siendo el amigable héroe del vecindario y equivocándose. Tenemos a un Hombre Araña en plena pubertad, enamorado, lidiando con los bullies y tratando de encontrar su lugar en el mundo, uno inmenso y complejo donde su único deseo es llegar a ser como esos superhéroes que ha visto desde niño en la televisión salvando vidas.

La decisión de omitir el origen del personaje (picadura de araña/Tío Ben/gran poder conlleva gran responsabilidad) es también un acierto y permite a la trama ir hacia otros lugares, explorar ese crecimiento y maduración del personaje a través de las relaciones que va teniendo en el camino, como sus conversaciones con la inteligencia artificial de su traje (a quien él llama Karen), momentos genuinos donde no solo vemos al superhéroe sino también a un chico de 16 años con los problemas e inseguridades típicos de su edad.

Desafortunadamente, las quejas de los fanáticos en las redes sociales reaparecieron tras el estreno de la cinta (fue un éxito en crítica y taquilla) pues sentían que el personaje dependía mucho de la tecnología proporcionada por Tony Stark, esto traicionaba directamente la esencia del personaje en el cómic pues en el mundo de las viñetas Peter Parker tiene un estatus de genio comparado al del millonario dueño de Stark Industries. Estas quejas resurgirían en la secuela, “Spider-Man: Far From Home”, pues el villano Mysterio (interpretado por Jake Gyllenhaal) está nuevamente ligado a Tony.

Lejos de casa

Para esta segunda película hubo un retroceso argumental pues muchos de los temas y situaciones de la primera cinta, las cuales debían tener consecuencias, fueron olvidadas: ¿Qué pasó cuando la tía May descubrió la identidad secreta de Peter? Nada, ahora lo ayuda a promocionarse como héroe, ¿En qué momento Peter olvidó a Liz y empezó a tener sentimientos por MJ, personaje con el cual interactúa cuatro veces en la primera película? Ni idea. Peter y MJ siempre han estado juntos en los cómics y aquí también van a estar, ¿Cómo sobrellevó Peter el hecho de que han pasado cinco años y literalmente volvió de la muerte? No importa, está triste, Tony murió y eso lo vuelve incompetente de nuevo.

La crítica y la audiencia amaron la película (por primera vez una cinta de Spider-Man volvió a estar entre las cinco películas más taquilleras de ese año) y terminaron en un punto interesante y nunca visto en la historia cinematográfica del personaje: se revelaba al mundo la identidad secreta de Peter Parker. En redes sociales los fanáticos se quejaron del engaño que fue el multiverso: la promoción del filme (los avances sobre todo) prometían la tan esperada confirmación del multiverso pues se mencionaba que Mysterio provenía de una tierra alternativa pero al final no resultó ser cierto.

Así llegamos a una tercera entrega donde las expectativas de todos están por las nubes porque los ejecutivos de ambas compañías han logrado capturar la atención del mundo con una simple palabra: nostalgia. La nostalgia vende y mucho. 

Por esa razón tenemos de vuelta al Doctor Octopus de Alfred Molina o al Green Goblin de Willem Dafoe, además del rumorado regreso de Tobey Maguire (el Spider-Man favorito de muchos por el simple hecho de haberlo visto en su niñez) y Andrew Garfiel (quien con el paso del tiempo ha ido obteniendo mayor aceptación entre el público). Los estudios cinematográficos ven a los fanáticos como dinero con patas y están dispuestos a traer de vuelta a cuanto personaje quieran ver las audiencias (la respuesta positiva y cantidad de memes sobre el “Hola Peter” del personaje de Molina en el primer avance confirma completamente esto), quienes pocas veces exigen a un blockbuster calidad.

Veremos si la recaudación en taquilla, respuesta crítica y los fanáticos vuelven a ponerse de acuerdo con una película del Hombre Araña. Los estudios, al momento, parecen tener confianza plena en su producto pues  ya están pensando en nuevas trilogías, spin-offs y crossovers con las medias hermanas feas (“Venom” y su secuela) que Sony tanto ha insistido en juntar con el Universo Cinematográfico de Marvel. A quince días del estreno la pregunta continúa: ¿Los estudios traerán de regreso a los anteriores Spider-Man con tal de romper la taquilla? La respuesta podría no sorprendernos… pero para averiguarlo solo queda esperar.