La comida chatarra o “comida basura” (del inglés junk food) se usa para referirse a los alimentos que contienen poca cantidad de nutrientes y sólo proporcionan al cuerpo un alto porcentaje de grasas, azúcar y sal; básicamente nos mantiene vivos pero no nos aporta nada y justo así se siente “Turno de día”, la nueva película de Netflix protagonizada por Jaime Foxx (“Spider-Man No Way Home”), Dave Franco (“Now You See Me”), Karla Souza (“Nosotros los Nobles”) y Snoop Dog (“Bob Esponja: Al Rescate”). Ópera prima del director J.J. Perry, antiguo stunt en cintas como “Avatar” o “John Wick”, la cinta mezcla géneros como la comedia, el terror y la acción para llegar fresca a los espectadores pero sin ofrecerles nada nuevo, justo como una hamburguesa de franquicia.

“Turno de día” nos presenta a Bud (Foxx), un cazador de vampiros radicado en Los Ángeles con muchos problemas financieros que podrían alejar a su familia de él. Así decide llamar a su viejo amigo Big John (Snoop Dog) para ayudarlo con su reincorporación al Sindicato de Cazadores de Vampiros; ahí es asignado al turno de día y puesto a prueba bajo la completa vigilancia de Seth (Franco), un novato con cero experiencia en el campo. Mientras esto sucede, el mundo vampírico, liderado por Audrey (Souza), busca la manera de caminar bajo la luz del sol.

La película entonces se transforma, desde sus primeros minutos, en una mezcla de géneros bastante interesante, lo cual recuerda mucho a “From Dusk Till Dawn” de Robert Rodriguez, pues pasa de ser un blaxploitation a una cinta de terror con tintes de buddy cop Movie con pinceladas de western de cuando en cuando. Esto, lejos de ser una debilidad por el constante cambio de tono, se convierte en una fortaleza para el filme pues mantiene la atención del espectador en todo momento. Aunado a esta mezcolanza están las increíbles escenas de acción, las cuales sobresalen debido a las coreografías, el uso de los espacios y movimientos de cámara ingeniosos, además de contener referencias a otras cintas (desde “El exorcista” hasta “Django” de Sergio Corbucci).

El guion, por otro lado, apela a lo familiar pues es fácil identificarse con los problemas de Bud y nosotros como espectadores no queremos verlo separarse de su familia, sin embargo, en cuanto se introduce al personaje de Dave Franco, los escritores (Shay Hatten y Tyler Tice) comienzan a caer en una exposición constante de muchos conceptos que fueron presentados de manera visual al inicio del metraje. Así mismo, la villana de la historia, interpretada por una Karla Souza cuyo rango de expresiones faciales es muy limitado, tiene motivaciones muy débiles y  explicadas a medias al final nunca terminamos de entender muy bien su plan (más allá de lastimar a la familia del personaje de Jaime Foxx). Incluso la batalla final, como un homenaje a Robert Rodríguez, sucede en un antiguo templo prehispánico, un dato sin importancia pero visible para quienes hayan visto esa vieja película de culto.

“Turno de día” se siente como comer una hamburguesa de Burger King o McDonald’s: se encuentra rápido en Netflix (como las cientos de películas de acción en la plataforma), tiene actores conocidos y queridos por el público, muchos colores, acción, comedia toques de terror y amor familiar. Probablemente no la recuerdes al poco tiempo de terminarla, tiene una duración algo excesiva (como los precios de la comida chatarra) pero aun así puedes pasar un buen rato al verla. 

“Turno de día” ya se encuentra disponible en Netflix.